¿Hay algo más desesperante que una lengua recorriéndote las zonas más sensibles de tu cuerpo? ¿O hay algo más delicioso que pasar la lengua por aquellas partes? Ya estuvimos hablando de algunas herramientas y creo que la lengua es una de las más poderosas. Es caliente, suave, es húmeda y capaz de generar intensas sensaciones.
Pasar la lengua entre los dedos y por las plantas de los pies de tu víctima la hará rendirse de risa.
Otra buena zona para probar son las axilas. Lo mejor para este caso es que la víctima se haya lavado el desodorante que utiliza.
He quebrado a algunos hombres lamiéndoles las costillas o las axilas, al punto ue me han pedido que pare y no me invitaron más por haber descubierto ese punto débil. Y también me han vencido a mí con eso. Creo que la sensibilidad a la lengua es algo que un ticklee aprende demasiado tarde.
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